Situaciones como maltrato físico o psicológico, abuso sexual, negligencia grave, ideación suicida, abandono, acoso escolar grave, o cualquier otra vulneración grave de derechos que afecte su integridad física o emocional.
Cualquier miembro de la comunidad educativa puede detectar una señal de alerta. Debe informar de inmediato al Encargado de Convivencia Escolar o al Director/a, quien recopilará los antecedentes con respeto y confidencialidad.
Cuando la situación es constitutiva de delito (como abuso sexual o lesiones graves) o existe un riesgo inminente para la vida o integridad del estudiante. La denuncia debe hacerse a Carabineros, PDI, Fiscalía o al Tribunal de Familia.
Debe derivar el caso a la Oficina Local de la Niñez (OLN) o a programas de protección como los de Mejor Niñez, y colaborar con todas las instituciones involucradas entregando los antecedentes necesarios y haciendo seguimiento del caso.
La confidencialidad, el interés superior del estudiante, la colaboración interinstitucional y el resguardo de la información sensible. Además, debe garantizarse el acompañamiento y apoyo al estudiante dentro del establecimiento.
HTML Generator