Establecer un procedimiento claro y efectivo para manejar la ausencia de apoderados en reuniones y su falta de participación en el proceso de aprendizaje de sus hijos, promoviendo la participación activa de las familias.

Notificar a los apoderados con al menos 7 días de anticipación, indicando la fecha, hora, lugar, temas a tratar y resaltando la importancia de asistir.

Debe justificar su inasistencia mediante una carta formal en un plazo máximo de 5 días hábiles. Si no lo hace, el profesor jefe o encargado de convivencia lo contactará y se ofrecerá un resumen de la reunión, además de una posible cita individual.

El caso se deriva al equipo de convivencia escolar o asistencia social, y se invita al apoderado a firmar un compromiso formal donde se detallan sus responsabilidades en el desarrollo académico de su pupilo.

Trimestralmente se revisa su implementación mediante comentarios del personal docente, apoderados y estudiantes, y se realizan los ajustes necesarios.

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